No podía
dejar pasar esta receta, o mejunje o lo que sea, que realice hace ya algunas
semanas con una de mis frutas favoritas: el aguacate.
Muchas
personas rechazan comerlo porque piensan que engorda mucho, pero personalmente
no creo que sea para tanto, ya que mucha de la grasa que contiene es buena. Y
para comerme que te digo yo…un san jacobo o algo así, prefiero mil veces un
buen aguacate.
Os voy a dar
solo cinco razones por las que son buenos:
-Pueden ayudarnos a mejorar los niveles de
colesterol y estabilizar el ritmo cardíaco.
-Ayudan al crecimiento y reparación de la masa
muscular.
-Disminuyen la
inflamación en las articulaciones y colaboran en la reparación del cartílago gracias a sus ácidos grasos
esenciales y vitamina E.
-Hacen sentirnos saciados durante más tiempo,
gracias a sus siete gramos de fibra por pieza.
-Mejoran el sistema inmunológico, por su alto contenido en
carotenoides.
Los ingredientes para una persona, si es plato único, o dos si es primer plato, son:
-Un aguacate
-Una lata de atún al natural.
-Un huevo duro.
-Un tomate.
-Una cebolla pequeña (solo usaremos la mitad de la mitad, si a
alguien le gusta mucho pues -que le ponga la mitad).
-Un limón.
-Mayonesa.
-Sal y pimienta.
Empecemos pues…
Tomamos el tomate y lo abrimos por la mitad para extraer todas las
pipas, y acto seguido sin quitarle la piel ni nada (si sois muy tiquismiquis se
la podéis quitar) lo troceamos en pedacitos cuadrados lo más pequeño posible.
Hacemos lo mismo con la cebolla (aconsejo no echar nunca más de la mitad de una
cebolla de tamaño pequeño). Le quitamos la cascara al huevo duro y lo partimos
también en trozos pequeños; ponemos todo esto en un plato, le añadimos la lata de atún y removemos todo
bien para que vaya ligando.
Por otra parte partimos el aguacate por la mitad y vamos
sacando toda su carne en trozos, y la bañamos con limón para evitar que se
oxide y se ponga de color oscuro. Lo añadimos a la mezcla y seguimos
removiéndolo bien. Le ponemos sal y pimienta al gusto y una cuchara sopera de
mayonesa. Mezclamos y remezclamos hasta que los sabores estén todos bien
revueltos.
Cogemos las cascaras del aguacate, las rellenamos y listo
para comer!!!!.
Una buena opción de cara a estas navidades, es sustituir el
atún por gambas cocidas y surimi. Presentandolo en una copa o algo elegante
conseguirás un primer plato o entrante de lo más original, sano y nutritivo.
Espero que lo pongáis en práctica y ya me diréis si os gusto
o no.
Saludos!!!!
